Este lugar es perfecto para mí, con una piscina al aire libre, wifi gratis en áreas comunes, y un bar acogedor. En mi primera estancia, el personal me ayudó a encontrar buenos sitios para comer, lo que recuerdo con cariño. ¡Volveré por Navidad!

Las habitaciones son amplias y muy limpias. La única pega es que la iluminación de noche es escasa.

La habitación era amplísima y muy limpia, con un encanto rústico. El desayuno personalizado fue una delicia y María, la dueña, es un amor. Solo un detalle, la iluminación nocturna un poco escasa, pero en general, un lugar encantador para descansar.

Las vistas desde la Quinta son espectaculares, con ondulantes colinas llenas de viñedos y olivos. El desayuno es un festín personalizado, con productos locales como mermeladas y yogures caseros que no querrás perderte. ¡Desayunar en la terraza con el canto de los pájaros es una experiencia inolvidable!

Falta de luz nocturna.

La iluminación al llegar te da una buena primera impresión y las habitaciones son amplias, limpias y llenas de encanto rústico.

La limpieza era buena, pero el desayuno fue un poco caótico por la gran cantidad de huéspedes, y se echa en falta un televisor en la habitación para aquellos momentos de relajación. Adicionalmente, la iluminación nocturna es escasa, lo que puede dificultar moverse por el lugar por la noche.

Quinta Do Salgueiro B&B, Turismo Rural es un lugar encantador. El desayuno fue espectacular, con productos locales frescos que realmente hicieron nuestra mañana. El personal fue increíblemente amable y nos ayudó con un desayuno temprano sin problema. Además, la piscina fue una gran ventaja durante los días calurosos.

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Desayuno personalizado espectacular.

el desayuno era muy bueno, pero la habitación carecía de mesa y sillas.

Recomendado para quienes buscan descansar

Desde que llegamos, la dueña fue increíble, siempre atenta y dispuesta a darnos recomendaciones. El desayuno en la terraza fue un placer, con productos locales frescos y una vista que te dejaba sin aliento. La habitación era grande y limpia, y teníamos acceso directo a la piscina, lo cual hizo las cosas más cómodas.

No fue barato, pero todo valió la pena.

La limpieza era impecable, el entorno rústico y cuidado aporta un encanto especial, además el desayuno personalizado estaba repleto de productos locales frescos. La piscina fue un gran alivio en los días de calor, y la amabilidad de María, la dueña, hizo que nos sintiéramos como en casa.

La iluminación nocturna es escasa.

Las vistas son espectaculares

El lugar es una maravilla, las habitaciones son amplias y tienen un toque rústico muy lindo. Desayunar al aire libre fue genial, con productos locales frescos que estaban de lujo. Solo un pequeño detalle, podría haber más luz por la noche, ya que a veces te toca andar con cuidado. Pero en general, es un sitio muy agradable.

El entorno es realmente encantador, con una limpieza impecable y la amabilidad de la dueña, que te hace sentir como en casa. Desayunar con productos locales frescos, como las deliciosas mermeladas, fue un verdadero placer. Sin embargo, la iluminación nocturna es insuficiente, y la falta de un televisor en la habitación se notó durante los momentos de relax. El desayuno estuvo un poco caótico por la gran cantidad de huéspedes, aunque la calidad de los alimentos era buena.

Habitaciones amplias y limpias, con un entorno rústico muy cuidado, además de un desayuno personalizado. ¡María, la dueña, es un amor y el lugar es precioso!

Pero, entre la oscuridad de la noche y mi torpeza, casi me convierto en un murciélago.